Comentarios sobre la ropa o acerca de las amigas, pueden llevar a la chica a situaciones de aislamiento y derivar en violencia de género, según alerta el IAM
La coordinadora del Instituto Andaluz de la Mujer (IAM), Soledad Ruiz, advirtió ayer de la necesidad de incidir en la prevención de la violencia de género desde la comunidad educativa y también en los hogares apostando por la convivencia. Según Ruiz, el objetivo es no sólo paliar la situación de las mujeres que «ya sufren violencia, o las que todavía no se han atrevido a denunciar», sino «influir» en la prevención con toda la comunidad educativa para «tratar de educar a la sociedad» planteando la necesidad de resolver los conflictos desde el «respeto a la persona».
Ruiz hizo estas declaraciones en el trascurso de unas jornadas que se celebran en Granada y en las que se analizan conductas sexistas en la adolescencia para tratar de conseguir su corrección. Y es que, pese a contar los adolescentes con más información y formación, hay casos en que las jóvenes «aceptan una serie de pautas de comportamiento» en el inicio de una relación, que no es propio del siglo XXI, agregó.
Ropa y amigas
Según detalló la directora del IAM, cuestiones como que no le gusta la ropa a su pareja o que no se acerque a sus amigas inician procesos de «aislamiento» a los que habitualmente «no les damos importancia por tratarse de cosas de adolescentes», pero que «sí pueden llegar a tener relevancia».
Aunque se trata de una cuestión que 'a priori' «todo el mundo conoce», según dijo la directora del IAM, «hay que acostumbrar a los menores a convivir pacíficamente en los centros y resolver los conflictos que tengan de este modo», algo que requiere también implicación por parte de toda la sociedad.
El objetivo es tratar esas conductas en los propios centros y analizarlo junto a compañeros, según indicó Ruiz, que destacó el hecho de que los Consejos Escolares tengan que realizar informes específicos sobre este tema, a raíz de la aprobación de la Ley que pretende que no se repitan comportamientos «no adecuados de personas adultas» que pueden derivar en futuras agresiones.
Ruiz destacó que se trata de la primera «visualización» de la recientemente aprobada Ley andaluza de Medidas de Prevención y Protección Integral contra la Violencia de Género, que obtuvo la pasada semana el respaldo unánime de los grupos en el Parlamento de Andalucía.
Según explicó no hay repuntes en las denuncias, sino que el aumento de las cifras se debe al avance producido porque antes «"tardaban en denunciar una media de de diez años la violencia, no sólo física, y ahora ese tiempo ha bajado hasta los siete años». Es positivo este dato, según Ruiz, pero aún queda mucho por hacer.
La Junta ha editado también material específico para ofrecer al profesorado y a las familias del alumnado de Primaria y Secundaria un acercamiento al fenómeno de la violencia en sus múltiples forma, aprovechando la celebración el 25 de noviembre del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.
Ruiz hizo estas declaraciones en el trascurso de unas jornadas que se celebran en Granada y en las que se analizan conductas sexistas en la adolescencia para tratar de conseguir su corrección. Y es que, pese a contar los adolescentes con más información y formación, hay casos en que las jóvenes «aceptan una serie de pautas de comportamiento» en el inicio de una relación, que no es propio del siglo XXI, agregó.
Ropa y amigas
Según detalló la directora del IAM, cuestiones como que no le gusta la ropa a su pareja o que no se acerque a sus amigas inician procesos de «aislamiento» a los que habitualmente «no les damos importancia por tratarse de cosas de adolescentes», pero que «sí pueden llegar a tener relevancia».
Aunque se trata de una cuestión que 'a priori' «todo el mundo conoce», según dijo la directora del IAM, «hay que acostumbrar a los menores a convivir pacíficamente en los centros y resolver los conflictos que tengan de este modo», algo que requiere también implicación por parte de toda la sociedad.
El objetivo es tratar esas conductas en los propios centros y analizarlo junto a compañeros, según indicó Ruiz, que destacó el hecho de que los Consejos Escolares tengan que realizar informes específicos sobre este tema, a raíz de la aprobación de la Ley que pretende que no se repitan comportamientos «no adecuados de personas adultas» que pueden derivar en futuras agresiones.
Ruiz destacó que se trata de la primera «visualización» de la recientemente aprobada Ley andaluza de Medidas de Prevención y Protección Integral contra la Violencia de Género, que obtuvo la pasada semana el respaldo unánime de los grupos en el Parlamento de Andalucía.
Según explicó no hay repuntes en las denuncias, sino que el aumento de las cifras se debe al avance producido porque antes «"tardaban en denunciar una media de de diez años la violencia, no sólo física, y ahora ese tiempo ha bajado hasta los siete años». Es positivo este dato, según Ruiz, pero aún queda mucho por hacer.
La Junta ha editado también material específico para ofrecer al profesorado y a las familias del alumnado de Primaria y Secundaria un acercamiento al fenómeno de la violencia en sus múltiples forma, aprovechando la celebración el 25 de noviembre del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.
Tomado de www.ideal.es
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