Que estas buscando?

miércoles, 16 de mayo de 2007

Sexys a los nueve años

Esta educadora señala con el dedo acusador hacia los padres. "Mientras ellos no adviertan del peligro que corren comprándoles revistas para niños de más edad o adquiriéndoles ropas que no les corresponden, la adolescencia cada vez se presentará antes", sentencia.
¿Sexys a los nueve años?
"¡Qué graciosa está la niña con ese vestido tan escotado!, es un comentario negativo"
"El peligro es que con esa edad no pueden valorar lo bueno o malo que se les propone"
MUCHAS menores con ocho o nueve años ya han empezado a asustar a sus padres con actitudes y comportamientos que corresponden a adolescentes con más de quince. "¿Estoy guapa?" es una pregunta recurrente de muchas niñas que ya no salen de casa sin mirarse en el espejo o cambiarse de ropa varias veces. Hoy a nadie le extraña ver en una tienda un tanga para una cría que no supera el metro, ni que vaya a darse unas mechas en la peluquería ni que las inscripciones en los tops diminutos que visten estén plagados de leyendas provocativas. Antes muerta que sencilla fue el grito de guerra que miles de niñas siguieron detrás de una pequeña de diez años que en una canción hacía una loa al maquillaje, a la peluquería, a la crema hidratante y al Chanel número 4.

La señales que todo el mundo ve en la calle han traspasado las aceras y se analizan ya en las universidades. Por eso, la Asociación Americana de Psicología ha dado la voz de alerta haciéndose eco de lo que numerosos especialistas en psicología y psiquiatría infantil denominan ya como la sexualización precoz de la infancia. Una tendencia que consiste en adelantar la adolescencia a edades cada vez más tempranas, sobre todo entre las chicas. Pero el fenómeno no es exclusivo, ni mucho menos, de Estados Unidos. En Euskadi, muchos adultos no salen de su asombro ante el llamativo aspecto de algunas menores y se preguntan por el cambio radical en los patrones infantiles. "Parece que ahora a estas niñas les salen las tetas antes que los dientes", comenta una amama con mucha sorna al acudir con su nieta a una tienda de ropa.

El resultado es que las niñas adoptan conductas sexuales que no les corresponden, que prestan una atención desmedida a su aspecto físico, a imagen y semejanza de las actrices y presentadores del momento. Piden a sus madres un pantalón como el de Christina Aguilera y buscan desesperadas el top de Britney Spears.

El físico fundamental"¿Te gusta mi pelo?". Ellas ya no se conforman con peinar a sus muñecas ni hacerles trenzas ni ponerles accesorios en las coletas. Sólo aspiran a llevar el peinado como Beyoncé. El marketing ha lanzado al mercado todo un kit de productos dirigidos exclusivamente al mercado infantil: se pueden comprar cosméticos, fragancias, brillos de labios y toda suerte de complementos de belleza.

"El pintalabios, toque de rimel, moldeador como una artista de cine, peluquería, crema hidratante y maquillaje que es belleza al instante", canta la pequeña María Isabel mientras contonea las caderas al más puro estilo Madonna.

Se trata de estar guapa, tener las piernas largas, el vientre muy plano y parecerse a las top-models más glamourosas que desfilan por las pasarelas del momento. Un auténtico drama para chiquillas que ni están tan estilizadas ni tienen la cara tan angulosa ni comparten la figura y estilo de ensueño de las modelos que salen en las revistas.

En resumen, problemas que antes preocupan a los padres de adolescentes y jovencitas, ahora quitan el sueño a progenitores de niñas mucho más pequeñas. "No sé lo que le pasa. Pero está muy rara. No quiere ponerse ningún vestido, sólo alguna falda corta y pantalones de talle bajo. Cada vez quiere parecer más mayor y esto me obliga a estar muy pendiente de todo lo que lee o qué programa de televisión le gusta ver", revela la madre de Ane con cierta angustia. Un galimatías juvenil bastante lógico si no fuera porque Ane solamente tiene ocho años.

A Ane tampoco le gusta cualquier juguete y ya no se conforma con el regalo del Olentzero pasado. La sociedad de Psicología Americana habla de las Bratz como el paradigma del juguete infantil con más reminiscencias sexuales. Porque son muñecas pero representan a crías que se maquillan, llevan tatuajes y piercing en la lengua o en los pezones con una clara connotación sexual.

Los expertos consideran que estas actitudes son claramente contraproducentes. "De los seis a los once años es la fase en que los niños deben tener todas las circunstancias para ser tranquilos, no rebeldes. Es el momento de copiar a los padres, de peinarse, vestirse, caminar y hablar como ellos, no están preparados para imitar modelos que sólo aparecen en la tele y en las revistas. Es la fase en donde los niños se pegan a los padres y las niñas a las madres", aclaran.

"Pero está claro que es únicamente obligación de los progenitores guiar y ayudar a sus hijos en este período".

Alerta medica. Psiquiatras y pedagogos coinciden en que el problema esta adquiriendo una grave dimensión y consideran que la dificultad no estriba solamente en el hecho de que este fenómeno les está robando una etapa necesaria, como es la niñez. La erotización infantil eleva el riesgo de problemas psíquicos y físicos a medio y largo plazo. Por ejemplo los trastornos de la conducta alimentaria como la anorexia y la bulimia aparecen mucho antes y ataca a niños de muy pocos años. El aspecto físico se ha vuelto un tema tan preocupante que ha provocado que estos problemas se hayan detectado en menores de diez años. "Nos enfrentamos a un auténtico cajón de sastre con muchas niñas con trastornos intermedios. No encajan en ningún patrón concreto pero tienen rasgos de varios de ellos", explica Carmen González, coordinadora de la Asociación en Defensa de la Atención a la Anorexia Nerviosa y Bulimia (Adanes) en la publicación 'Padres y colegios'.

Otro de los grandes males de la sociedad actual, los complejos estéticos, también comienzan a estar presentes desde la más tierna infancia, elevando el tener una nariz grande o unas piernas un poco cortas a la categoría de asuntos muy graves. Los especialistas ya han advertido de que atienden consultas para intervenciones en púberes que no han acabado la Secundaria. Pero lo peor viene luego cuando los padres les prometan la operación para agrandar los pechos cuando aprueben el Bachillerato.

Las 'lolitas' de la campaña de Armani

La controvertida campaña de Armani Junior -que desató un aluvión de críticas- convirtió el tema de la exposición sexual de las menores en un auténtico polvorín. En momentos en que la lucha contra la pornografía infantil y el turismo sexual con menores está en plena ofensiva, una marca de moda tan reconocida como Armani lanzó una polémica campaña de ropa para niños. Llamativa pero tremendamente desafortunada. La imagen de dos 'lolitas' de rasgos orientales que no superaban los cinco o seis años, vestidas con muy poca ropa y mirada sugerente para publicitar la próxima colección levantó airadas críticas y provoco la retirada casi fulminante de la campaña. El Defensor del Menor de la Comunidad Autónoma de Madrid, Arturo Canalda, denunció las fotos y las vallas publicitarias al considerar que "con este anuncio, Armani está lanzando un doble mensaje: por un lado provoca confusión en los adultos, que quedan impactados, y por otro, confunde a los niños, que no perciben que se les esté anunciando ropa". A su juicio, no parece que el mensaje publicitario esté destinado a vender ropa infantil ni que sea la representación más adecuada para las menores. >C. Lago

TALLA INFANTIL

· "Cada día, empiezan antes". La Asociación Americana de Psicología advierte del peligro que conlleva adelantar los cánones de la adolescencia a edades tempranas.

· Barbie no existe. Las nuevas muñecas cuidan su aspecto físico hasta extremos llamativos. Pero una cosa está clara: si Barbie fuera una mujer real con sus medidas se partiría en dos.

· La 'publi', la mala de la peli. La presión social de la publicidad es decisiva. En el caso de las Bratz el efecto mediático es espectacular. Y los publicistas saben que tienen en sus manos un mercado fácil al que manejar: el infantil.

· Sexualización precoz. Algunos concursos o certámenes musicales potencian la sexualización precoz.

la cifra

10

· Trastornos alimentarios. Los expertos han detectado trastornos alimentarios de anorexia y bulimia en niños de incluso diez años.

· Complejos físicos. La preocupación por el aspecto y los 'defectillos' fisicos empiezan a presentarse en la más tierna infancia.

concha lago

Bilbao. Desde su posición de educadora, tiene las ideas muy claras_ Son los padres los que compran los juguetes a los hijos, quienes deciden qué programa ven en la tele y la responsabilidad de los maestros es muy matizada.

El mundo al revés: Las niñas quieren parecer mayores y las mayores quieren parecer jóvenes.

Los cánones de belleza y estética femeninos adultos están cuajando cada vez más entre las niñas. Hace pocos años solían decantarse por jugar con muñecas que representaban a bebés que lloraban pero actualmente se ofrecen modelos de juego que poco tienen de inocente. A las menores se les propone y se les adelanta un estilo de vida que está muy desligado de su desarrollo psicológico. El peligro inmediato es que los niños no tienen todavía desarrollada la capacidad madurativa y de raciocinio suficiente como para valorar lo bueno y lo malo de lo que se les propone.

Pero imitan modelos cada vez más sexys.

La vía principal de aprendizaje del niño es la imitación de lo que vea a su alrededor, en su familia, en la televisión, en la escuela, en sus amigos... Eso es lo que va a ayudar a modelar su conducta. Por ello, es lógico que algunos imiten modelos cada vez más sexys y provocativos si es lo que están percibiendo. A ello se le suma que los niños todavía no son capaces de decidir libremente qué imagen quieren tener y que la gente en vez de proponer modelos de imagen alternativos refuerzan a los niñas con comentarios halagadores como "qué guapa y qué graciosa está la niña con este vestido escotado". Por eso es lógico que empiecen a demandar productos destinados para más edad.

Las niñas se contonean como Shakira, sus heroínas tienen cuerpos de mujer adulta... ¿Es un fenómeno natural?

Los programas de televisión nos muestra cómo los niños son y se comportan como pequeños adultos, cómo los personajes de los dibujos animados tienen los cuerpos totalmente formados y actúan y piensan como adultos, e incluso cómo las tiendas de ropa infantil tienen una línea muy comercial de prendas de vestir que imitan a la de los adultos. Es decir: lo que sucede es que en la sociedad está apareciendo un nuevo modelo o nueva concepción de la infancia como una adolescencia adelantada. Este fenómeno se puede entender como contranatural entendiendo por ello ir en contra de los tiempos que marca el desarrollo evolutivo infantil. Además colabora a que inocencia de la infancia se pierda a marchas forzadas

Y las Bratz como juguetes de referencia.

Las Bratz permiten seguir jugando a lo que a las niñas les gusta (maquillarlas, peinarlas, jugar con ellas a papás y a mamás). Por otro lado, sería bueno poner bajo sospecha la filosofía que hay detrás desde el punto de vista educativo. De hecho, en estas muñecas que defienden este estilo rebelde, su éxito se ha logrado "gracias a su sofisticado estilo y a su vestimenta, demasiado sexy para el gusto de muchas madres".

No hay comentarios.: