Entrevistas Indalia.es. Eva Quereda. Almería, 4 de julio de 2007.
"Animo a las mujeres maltratadas a que no tengan miedo y denuncien, de esto se sale" No quiere que mencionemos su nombre completo ni que demos ninguna seña que pueda dar alguna pista de su identidad. María, simplemente, es víctima de la sinrazón de un hombre machista. Ella ha participado en el programa "Cualifica", organizado por el Instituto Andaluz de la Mujer, con el que se persigue la inserción profesional de mujeres víctimas de violencia de género. Este curso le ha dado la oportunidad de aprender un oficio con el que volver a empezar una nueva vida. Y así se siente ella, una mujer nueva con un futuro esperanzador. P- ¿Qué ha supuesto para usted el programa Cualifica?
R- Me ha aportado mucho, me siento realizada. Después de mucho tiempo, el saber que he puesto empeño en aprender un oficio, que suele además ser ejercido por hombres, y que estoy ahí, trabajando en una empresa, me está dando mucha fuerza. El programa me ha ayudado a tener una estabilidad. Aunque tengo un contrato de tres meses, pero mi empresa está muy contenta conmigo y está hablando de renovarme con un contrato indefinido. P- ¿Ha cambiado su vida a raíz de este programa?
R- Sí, estoy viendo la vida de otra manera. Ahora estoy en un trabajo que me gusta, porque lo elegí yo. Estoy trabajando de fontanera, de escayolista y pintora en una empresa. Estoy ejerciendo los tres trabajos y eso me ha cambiado todo. Quiero llegar a que me cambien el contrato, no figurar como ayudante de fontanera, sino ser fontanera. Y sacarme el carné de conducir, hacer mi trabajo sola, que me suban el sueldo. P- ¿Se sorprende la gente cuando llaman al fontanero y ven llegar a una mujer?
R- Al principio, la reacción de los clientes es de desconfianza. Son un poco reacios a que les atienda una mujer en este tipo de trabajos. Pero poco a poco voy teniendo más seguridad en mí y eso la clientela también lo nota. P- ¿Ha encontrado la ayuda que esperaba?
R- Después de seis años que se van a cumplir desde que me separé y que me fui con mis niñas, ahora es cuando he encontrado esa ayuda que me hacía falta. No económicamente, como hay muchas mujeres que esperan, porque creo que lo más importante es que te ayuden a ayudarte a ti misma. Esto hace que te valores más y valores la vida. P- ¿Y por qué ha pasado tanto tiempo?
R- Porque he estado tan ocupada trabajando para sacar a mis niñas adelante, que tampoco he ido a preguntar. Además, si vas a pedir ayuda tienes que contar tu vida y yo he querido, no olvidar, porque no se olvida, pero no me gusta hablar del tema. Entonces lo he ido dejando. No me ha faltado trabajo, pero cuando se enteran de que estás sola y que tienes dos hijas que mantener, abusan un poco de una. En el sentido de que "como lo necesitas, pues quédate más horas y te pago lo mismo", porque saben que si pierdes el trabajo, te quedas sin nada. Y eso es algo que debe cambiar. P- ¿Cree que la Justicia ha actuado con eficacia para resolver su problema?
R- Lo peor es que todavía no se me ha escuchado. Lo que más me está afectando es que esto dure tanto tiempo, es un maltrato psicológico. Es su palabra contra la mía, pero. es que no me gusta hablar del tema y además me pongo nerviosa.Es todo tan complicado. llevo seis años, no tengo nada solucionado, nunca he tenido protección. Yo salí de mi pueblo en 2001 y me fui sola con mis niñas a una casa de emergencia. P- ¿Y su familia?
R- Me fui sin despedirme de ellos, porque mi familia también tenía miedo de que él me hiciera algo. Entonces, ha sido todo tan difícil, he tenido que estar cambiando de abogado continuamente. Yo sigo confiando. No quiero contar nada porque confío en la Justicia. Tengo la patria potestad de mis hijas, pero estoy a la espera de un juicio de lo Penal. Me gustaría que fuera todo más rápido, porque las mujeres que estamos en esta situación necesitamos cortar y empezar de nuevo. P- ¿Sigue teniendo miedo?
R- Cada vez que me entero de que una mujer ha muerto víctima de malos tratos, me pongo mala. Yo estoy en la misma situación que muchas de ellas, aunque hayan pasado ya seis años. Una vez me dijeron en los juzgados que "ha pasado mucho tiempo y no se ha acercado a ti"; pero quien conoce al agresor es la víctima y a ellos les da igual, aunque pase tiempo, yo sigo teniendo miedo entre comillas. Ahora me siento más segura de mí misma, pero la amenaza sigue estando. Yo nunca he tenido orden de alejamiento porque creo que eso no facilita nada. El agresor está ahí, al acecho y le da igual una orden de alejamiento. No hay nada que le impida acercarse a la víctima y si quiere agredir, lo hará. P- ¿Qué le diría a una mujer que ahora se encuentra en la situación en la que estaba usted hace seis años?
R- Nos sentimos solas, con miedo y con la autoestima por los suelos. No nos creemos capaces de realizar nada, y si hacemos algo, pensamos que lo estamos haciendo mal. Me gustaría decir a esas mujeres que se sale, queriéndote un poquito. Y si no, debes mirar a los que tienes al lado, a los que te quieren, a tu familia, que es lo más importante. Mis hijas han sido el motor que me ha ayudado a volver a moverme y me han dado mucha fuerza.
Animo a las mujeres que han vivido lo que yo, les quiero decir que hay que poner un poquito de voluntad. A fuerzas de palos se aprende y yo aprendí que no te tienes que infravalorar, y si sales de esa vida nunca volver a caer. Porque muchas mujeres tienen la necesidad de seguir dependiendo de un hombre. Hay que ser fuerte y darse cuenta de que tú vales por ti misma y de que hay que ser independiente. Tienes que quererte para luego querer.
Que no tengan miedo, que denuncien, que hay muchas ayudas y gente que está ahí, que te entiende y que saben que necesitas a alguien al lado en esos momentos. Tomado de www.indalia.es |
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