Que estas buscando?

jueves, 5 de julio de 2007

Un 80% de ancianos padece depresión

          La tristeza permanente en los adultos mayores, se debe al abandono en el que viven
 
           Fátima Gaspar   2/7/2007

Antonio Palacios Isaac titular del departamento de Salud Mental del Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores (Inapam) refirió que el 80% de los ancianos padecen depresión mayor, "podría pensarse que padecen algún tipo de demencia, pero no, están deprimidos".

Explicó que la depresión en las personas adultas mayores se presenta por el abandono que sufren por parte de familiares y de la misma sociedad, además de la falta de ingresos económicos, viven preocupados por lo que será el resto de sus días si no tienen dinero.

Palacios Isaac señaló que el abandono económico es una agresión psicológica para los adultos mayores, ya que sienten que los dejan de lado.

Sin embargo dijo que en Inapam están realizando un gran esfuerzo con las actividades a las que someten a los adultos mayores, ya que se mantienen activos practicando algún deporte, cultura y se les enseñan algunos oficios.

Entre los primeros síntomas de depresión de los ancianos se encuentran síntomas afectivos consistentes en una alteración del humor entendido como alteración del estado de ánimo. Es el ánimo depresivo o tristeza vital. Otros síntomas de esta esfera afectan a la pérdida de interés por las cosas así como a la capacidad para disfrutar. Constituyen el núcleo central de la depresión y se acompañan de una disminución de la vitalidad con alteración de la actividad laboral y social del individuo. En esta esfera pueden existir otros síntomas como ideas de culpa, autorreproches, pesimismo, desesperanza, dificultad para concentrarse, ideas de suicidio...

Sin embargo en la depresión existen síntomas corporales o somáticos siendo los más frecuentes las alteraciones del sueño con insomnio y menos veces hipersomnia; pérdida de peso con falta de apetito; cansancio o falta de energía. Pueden existir otras muchas quejas somáticas: gastrointestinales, vértigo, dolor, cefalea.

Otros factores son la pérdida de salud que acontece con la edad. En muchas ocasiones ésta pérdida de salud condiciona deterioro funcional con tendencia a la dependencia física y pérdida de autonomía. Presencia de enfermedades crónicas, pérdidas de familiares, amigos y seres queridos en ocasiones acompañadas de reacciones de duelo patológicas. Merma de la capacidad económica. Pérdida de roles en el seno de la familia con la salida de los hijos y un papel menor del abuelo dentro de la misma. Cambios con la llegada de la jubilación, que condiciona un cambio brusco en la actividad y relaciones sociales.

Tomado de www.enfoqueinformativo.com

No hay comentarios.: