Gonzalo Gallo González - Escritor - Conferencista
No hay fórmulas mágicas para vivir en pareja, pero sí hay llavecitas que abren puertas y despejan el camino como éstas:
- Sé generoso y busca siempre acuerdos de doble beneficio, acuerdos de ganar-ganar. En otras palabras, no pelees por tener el control. Eres sabio si a veces cedes para ganar lo que sí vale.
- Sé comprensivo y no permitas que el pasado enturbie el presente y acabe con el porvenir. Una relación es serena cuando archivas las ofensas y en el perdón hallas esperanza y armonía.
- Sé creativo con tu pareja. Si ambos espantan la rutina de su romance y su vida sexual, nunca se apagará el fuego del deseo. Lleva esa misma creatividad a otras áreas de tu vida porque saber innovar es el secreto para perdurar.
- Vive unido a Dios y Él te dará fe para creer, esperanza para avanzar y amor para ser feliz y dar felicidad. El amor viene de Dios y solo con Dios crece y perdura.
- Haz todo lo que puedas para mantener viva la admiración que sientes por el otro y que despiertas en él. Donde hay admiración el amor está vivo.
Uno de los retos en la convivencia es conocer lo que en realidad necesita el otro con base en las diferencias entre el hombre y la mujer. Te invito a meditar y aplicar a tu relación de pareja varias sugerencias prácticas del psicólogo y consejero John Gray:
- Una mujer necesita cuidado, que su pareja se preocupe sinceramente por ella y por su bienestar.
- Un hombre necesita confianza, que crean que está haciendo lo mejor que puede, dentro de sus límites. Una mujer necesita ante todo comprensión y un hombre se siente bien cuando hay aceptación.
- El papel del hombre es comprender con empatía, sin juzgar los sentimientos ni las actitudes.
- Entonces la mujer que recibe afecto está dispuesta a aceptarlo, sin que eso implique tolerar abusos.
- Ella pide devoción: sentirse adorada y especial, estar en el primer lugar para su pareja. Agradece las palabras bonitas y los gestos galantes.
- Él pide admiración: sentir que deslumbra con sus cualidades y recibir una aprobación complaciente por lo que es y por lo que hace.
La vida en pareja pide reafirmar lo positivo y ver lo negativo con los ojos del amor tal como lo hacían de novios. Si usted se lo propone puede limar asperezas, ceder, acentuar todo lo bueno y expresar el amor. Las parejas felices viven abiertas al perdón y a la admiración, son tolerantes y buscan acuerdos de mutuo beneficio. Sí, hay que reconstruir el edificio del amor cada día, y aquellos que lo hacen se aman más y evitan conflictos innecesarios. No te quejes de la oscuridad porque es la que te permite disfrutar el brillo de la luna y las estrellas. Una de las mejores ayudas para estar bien en pareja es la "reafirmación de lo positivo", técnica que recomienda el psicólogo Peter Berger.
tomado de www.portafolio.com.co
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