¿Cuál es “El Sexo Débil”?

 

María Marín Michael, el mejor amigo de mi esposo y su señora Luz, nos invitaron a un lujoso restaurante italiano. Habíamos finalizado la exquisita y suculenta cena, cuando el mesero se acercó a preguntar que deseábamos de postre. Todos en la mesa, con excepción de Luz, nos tocamos el estómago insinuándole que estábamos inflados de tanto comer. En ese instante, Luz -quien había comenzado una dieta esa mañana- dijo"¿María, compartimos un pedazo de pastel de chocolate? Y aunque a mi vientre no cabía ni un"tic-tac" de menta, sin titubear le dije al camarero "Umm... traiga dos cucharas por favor", Michael se sonrió y le comentó a mi esposo "!por eso es que las mujeres son conocidas como el sexo débil!". Aunque su observación fue sencillamente una broma, me hizo pensar "¿por qué a las mujeres nos califican así?". Esta interrogante me hizo investigar detalladamente este tema y descubrí que nos denominan el sexo débil porque nuestra estructura corporal generalmente es más pequeña que la de un hombre. Pero quise indagar aún más a fondo y quiero compartir contigo los asombrosos descubrimientos que prueban que la mujer es, en realidad, el "sexo fuerte": 1) Nosotras vivimos una vida más larga - Las causas de muerte más comunes son el cáncer, la diabetes, infartos, las cuales atacan con más frecuencia a los hombres. De cada nueve personas que llegan a cumplir 100 años, ocho de ellas son del sexo femenino. Y de las personas que cometen suicidio después de los 65 años, el 84% son hombres. 2) Podemos completar más trabajos - El cerebro del hombre piensa en forma lineal y tiende a hacer una sola labor a la vez, mientras que la mujer tiene pensamientos entrelazados y pueden manejar varios trabajos al mismo tiempo; mientras ayuda al niño con la tarea, puede cocinar, planchar, ver la novela y hablar con su mamá por teléfono. 3) Somos mejores empresarias - Las estadísticas muestran que las empresas dirigidas por mujeres tienden a permanecer vigentes por más tiempo que otras compañías. Esto se atribuye a que ellas se interesan más en llevar una buena relación con sus empleados y proveedores. También tienden a recopilar mucha más información que un hombre cuando tiene que tomar una decisión importante. 4) Superiores comunicadoras - Desde pequeñas somos más verbales que los varoncitos. Los expertos dicen que el estrógeno provee un mejor fluido de información hacia las neuronas facilitando nuestras habilidades lingüísticas. Por eso podemos persuadir a otros con más facilidad y somos mejores para negociar. Además de estos puntos, descubrí un sin número de razones que prueban que no somos el sexo débil. De hecho, estamos capacitadas física, emocional y mentalmente para tolerar más dolor que ellos. Somos procreadoras...¿Hay que decir más? Admiro al amigo de mi esposo porque reconoce que la única razón por la cual deben llamarnos el sexo débil, es por nuestra "debilidad" por el chocolate.

Tomado de www.laraza.com