Mujeres empresarias, ¿cuál sexo débil?

Rompen estereotipos y usan su experiencia para salir adelante y triunfar, incluso más que los hombres

María A. Jiménez


En el mundo de los negocios aquello tan anticuado de llamar a las mujeres "el sexo débil" queda -una vez más- probado como algo absurdo.

La frase cae aplastada por su propio peso, las mujeres empresarias o trabajadoras de una empresa han demostrado que tienen características que las hacen tanto -¡y muchas veces más!- exitosas que los hombres.

Y la mujer latina que es empresaria, dueña o ejecutiva de una empresa rompe estereotipos y usa su experiencia para salir adelante y triunfar. ¿Cuáles son esas características y conocimientos?

1.- Usan su intuición -y su saber o know how 100% femenino- para reconocer qué necesita el público y qué tipo de negocio tiene cabida en el mundo actual de los negocios.

La mujer, mucho más que el hombre, comprende situaciones cotidianas y la necesidad de resolverlas. Y algo tan del mundo de hoy como tener mil necesidades a la hora de cuidar a sus hijos y a sus familiares de la tercera edad la lleva a buscar "nuevos ángulos empresariales", que pueden comenzar siendo pequeños negocios y después crecerán.

Un caso perfecto: conocí a una poderosa empresaria latina de Arizona que creó una compañía "de transporte para los ancianos o jubilados que no conducen y necesitan transportarse -¡y llevar un acompañante, lo que es aún más importante!- en sus visitas al médico, a los centros de rehabilitación e incluso al banco o al podiatra".

El negocio comenzó atrayendo a amigas con autos, de forma muy sencilla y grass roots, ¡y hoy en día ha crecido un 300% y es exitosísimo, teniendo contratos del propio gobierno para proveer no sólo el transporte, sino el tender loving care que los ancianos necesitan!

2.- La mujer empresaria sabe administrar un presupuesto pequeño de forma mucho más realista y, por ende, está acostumbrada a cortar gastos en su vida hogareña y saber usar descuentos y oportunidades prácticas. Cuando tiene un negocio propio le imparte ese conocimiento -y esa capacidad de sacrificio- de forma muy efectiva.

Las mujeres prefieren que sus nuevas compañías sean pequeñas y fáciles de administrar, no necesitan extravagantes comodidades ni enormes oficinas para triunfar y ese sentido del ahorro las ayuda muchísimo a manejar presupuestos y ganancias.

Al disfrutar de ser "su propia jefa", trabaja duramente, muchas horas y con gran seguridad en sí misma, el resultado es el récord de éxito que las mujeres tienen en sus empresas.

Según me dijo un experto de negocios, ellas triunfan porque "tienen la habilidad de pensar en lo esencial".

3.- La empresaria exitosa piensa rápido, toma decisiones juiciosas y es disciplinada, logrando adaptarse a los parámetros de su propio negocio ¡además de que sabe lo importante que es mantener "un ojo" en la contabilidad y las ganancias!, porque el éxito del negocio se mide en ganancias. Las empresarias no heredan sus negocios ni los compran cuando ya están establecidos, sino que los crean ellas mismas.

4.- La empresaria exitosa está acostumbrada a luchar y no se asusta con los altibajos y baches del camino, enfocándose positivamente en el resultado final.

5.- Las estadísticas demuestran que las mujeres inmigrantes "son uno de los segmentos de propietarios de pequeños negocios en Estados Unidos de más rápido crecimiento y tienen las más altas tasas de empezar nuevos negocios, en comparación con los estadounidenses nativos", de acuerdo con el economista Robert Fairlie, del Índice Kauffman de Actividad Empresarial.

6.- Las mujeres inmigrantes abren negocios en un promedio del 41% más alto que las mujeres nativas y lo hacen por muchas razones: flexibilidad de horarios, para poder seguir educando a sus hijos, cuidando a sus padres y para sacar provecho a sus habilidades, las que muchas veces son muy codiciadas en Estados Unidos (como es el campo de la costura o de la enfermería en el cuidado de la salud).

7.- Estudios demuestran que los negocios a cargo de mujeres ofrecen más beneficios, como horarios flexibles, ayudas con costos escolares o trabajos compartidos, eliminando barreras del mercado laboral tradicional, lo que garantiza la participación de más mujeres en la economía.

8.- Resumiendo, y esto es lo más importante de todo: las mujeres empresarias de pequeños o grandes negocios buscan una gran satisfacción personal y poder ampliar horizontes. Les emociona ver crecer su idea y les encanta aprender nuevas cosas.

Según los expertos del Departamento del Comercio de Estados Unidos: "Las mujeres comienzan sus empresas para crear un futuro seguro y poder escoger su forma de vida, y muchas tienen una misión comunitaria que les trae satisfacción y éxito".

Tomado de www.laopinion.com