Ricardo Goncebat,
20 de Diciembre de 2007
Las personas casadas gozan de mejor salud, viven más y son más felices que las solteras. Especialmente ellas, las mujeres, y sobretodo en los países mediterráneos, según estudios recientes. Aunque al igual que ocurre en los matrimonios, no hay consenso y el tema es objeto de acaloradas discusiones.
Hay indicios de que las personas casadas tienen mejor salud que las solteras. Hasta ahora, los estudios señalaban que los efectos positivos del matrimonio eran más fuertes para los hombres.
Pero la investigación que se esta llevando a cabo el Centro de Investigación en Economía del Bienestar y las universidades Pompeu Fabra y Rovira i Virgili, de Barcelona, sugiere que, contrariamente, los beneficios resultan ser mayores para las mujeres.
Han descubierto además que la relación entre matrimonio y buena salud es más acusada en los países mediterráneos como España, Italia, Grecia o Francia, que en el resto de Europa.
Se barajan varias razones para explicar el binomio matrimonio y buena salud y que los solteros, divorciados o viudos sean más proclives a una salud deficiente, según los autores del estudio.
Una hipótesis sostiene que la salud se beneficia del apoyo moral y económico conferido por el matrimonio, mientras que según otra teoría las personas sanas ya de por sí son mas propensas a casarse y posiblemente a permanecer casadas.
También hay quienes afirman que las personas menos saludables tienen tendencia a no casarse o son más propensas a separarse, divorciarse o enviudar.
El objetivo de este nuevo estudio es analizar cuál de las dos últimas hipótesis es la que tiene mayor peso a la hora de explicar la relación entre matrimonio y salud. Es decir, si es el casarse lo que mejora la salud o, si por el contrario, la buena salud es ya de por sí un factor que predispone al matrimonio.
Los investigadores catalanes aseguran que el matrimonio puede ser un buen incentivo para adoptar estilos de vida o abandonar malos hábitos, lo que se traduce en un aumento de la salud.
Actualmente, no hay un consenso científico sobre la relación entre matrimonio y salud, ni sobre a quien de los miembros de la pareja, es decir el esposo o la esposa, beneficia más el enlace.
Para algunos expertos, los varones con pareja tienen un mejor estado de salud que las mujeres que comparten su vida con un compañero, es decir que los hombres se benefician más de vivir en pareja que las mujeres.
Ello puede deberse al denominado "efecto protector" o la capacidad que tiene la mujer para mantener al hombre alejado del exceso de hábitos perjudiciales, como el tabaquismo, la bebida o el sedentarismo.
Investigadores de la Universidad de Magdeburgo, en Alemania, han comprobado en un estudio con más de 100,000 personas de toda Europa, que los hombres casados viven 1,7 años más que los solteros, mientras que en las mujeres se produce el efecto contrario: su esperanza de vida baja en 1,4 años en comparación con las que no se casan.
Entre los factores que pueden explicar este fenómeno se encuentran el estrés que implica compaginar la vida laboral con la doméstica
Tomadio de www.univision.com
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